Un mismo vehículo cambia radicalmente su comportamiento en función del tipo de neumático y de la presión con la que circulamos. Para no tener ninguna sorpresa debemos ser muy conscientes de lo que podemos exigir de nuestros neumáticos. su mantenimiento es fundamental, y el momento de plantearse el cambio vendrá dado por el desgaste o para buscar mejores aptitudes según el uso que le demos a nuestro vehículo.
No existe un neumático que sea válido para cualquier superficie, y por lo tanto tendremos que hacer una lista con las situaciones reales que nos podemos encontrar y con los diferentes tipos de superficies para hallar el que mejor se ajuste a nuetras necesidades.
Básicamente existen cuatro tipos de neumáticos: de carretera, mixtos, todoterreno y extremos. Habitualmente los todoterreno y SUV de serie llevan neumáticos de carretera, es decir de 100 a 80% asfalto. Los mixtos, llamados 50/50 porque sirven tanto para asfalto como para pistas, son los modelos polivalentes por existencia y mantienen buenas aptitudes en todas las situaciones.
Los todoterreno, 80% montaña, 20% asfalto, son modelos estudiados para un buen comportamiento en la mayoría de superficies por lo que son perfectamente válidos en asfalto, y los extremos están reservados exclusivamente a la práctica del todoterreno.
LA PRESIÓN DE LOS NEUMÁTICOS
Un neumático es un balón de goma cuya misión es absorber las irregularidades del terreno y proporcionar buena adherencia. El elemento fundamental que permite su funcionamiento es el aire, y por esta razón es tan importante conocer y controlar su presión.
Cada fabricante recomienda dos niveles de presión, uno para el eje delantero y otro para el eje trasero. Habitualmente todos suelen trabajar entre 2,2 y 2,4 bar. Sólo es recomendable aumentar el nivel de presión por encima del máximo cuando cargamos mucho peso o arrastramos un gran remolque, sin embargo nunca subiremos por encima de 3 bar. La presión alta en montaña, alrededor de 2,4 bar, protege las gomas de cortes de piedras, pero debido a su poca deformación castiga más las suspensiones. Presiones de 1,5 - 1,2 bar son más recomendables en barro, e incluso en arena, donde podremos llegar hasta 0,8 - 0,7 bar. Cuanto menor es la presión mayor es la tracción, pero perdemos robustez, la deriva es elevada y corremos el riesgo de deslmontar. Para evitarlo se suele montar cámara o utilizar unas llantas Beadlock, de borde reforzado.
un experto jeepero me dijo que tenia que cambiar las llantas de jeep, ya que con las que tengo no podia ir a ruta; mis llantas son wild country? y necesitaba unas mud terrain, que tan cierto es esto?
ResponderEliminar